SEGÚN JUNG, LA PSIQUE ES ANDRÓGINA
Anima y animus son conceptos arquetípicos universales y transpersonales del femenino y el masculino, sumamente útiles a nivel simbólico y que derivan de la psicología Jungiana.
Según Jung, la psique es andrógina, pero, la personalidad adopta el rol del género en el cual naces y en contrapeso, nuestra psique genera para balancearse, los arquetipos anima (en el hombre) y animus (en la mujer) Es lo llamado contrasexualidad. Estos arquetipos aun siendo universales, van evolucionando a medida que se nutren de nuestras experiencias personales y del colectivo.
Todos generamos un ánima (irracional, emocional e intuitiva) o un animus (racional) y está contrasexualidad busca ese balance que permite que nos relacionemos sanamente con nosotros mismos, con otros y con el entorno.
Hay que tener en cuenta que es en el contexto Jungiano y que estos son arquetipos del alma y ambos son un puente entre el inconsciente personal y el inconsciente colectivo.